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La tabla del dos
Nací sorda. Hablo con mis manos, en la lengua de signos que se oye con los ojos. Porque hablo otro idioma, me llaman discapacitada. Nací mujer, de nacimiento y pensamiento. Veo muy bien y veo que me miran mal, a veces por estar callada, otras veces por ser mujer. Así que, discapacitada y mujer, muchas veces me siento doblemente pisoteada.
Cuando el viejo murió, mi hermano,se quedó con las vacas, las tierras y el caserío. En la conversación entendí el porqué: la tradición de los hombres y las leyes –hechas por los hombres– discriminan a las mujeres. Fui despreciada por partida doble.
Mi hermano, bien pronto vendió las vacas y la tierra, y ya no sabemos más de él. Vivo con mi madre, en el pueblo, con dos gallinas viejas ya muy duras para el caldo. Total que somos un equipo de cuatro hembras no productivas y fuera de la economía, lo más parecido a no ser nada. Rurales y mujeres, por dos veces olvidadas.
Decidí que sería campesina. A madre le pareció bien. Con caricias le cuento cuentos a la tierra, la mimo y ella me responde. Abrazo a los frutales que me avisan cuando llega su parto. Porque soy campesina y mujer, dos veces madre.
Este año la fruta se paga muy mal. En el sindicato explican el problema: las manzanas, peras o kiwis que llegan de otros países no incluyen los costes laborales, ni sociales, ni ecológicos. Allí, son las manos y el esfuerzo de mujeres, niñas y niños, quienes riegan, podan y recolectan a cambio de miseria, maltratos y violaciones. Me parece una injusticia sobrevivir en un modelo que pone a competir la mano de obra de aquí con la de allí. Y salgo a las movilizaciones que en el Sindicato han organizado. Mi pancarta chilla tan lejos y fuerte como las de los demás. Mujer y combate, el doble de coraje.
Ahora quiero tener voz en las reuniones pero no alcanzo a que me vean, a que me oigan. ¿Por mi lenguaje? No, por ser mujer me hicieron invisible. Mujer más aspiraciones, resultado: menos dos
Sigo sin hablar pero sé contar. Y cuento que el patriarcado y el capitalismo multiplican por dos las dificultades de vivir en este mundo.
Gustavo Duch
Ilustración: Noelia González
El patriarcado y la subordinación de las mujeres
El informe del PNUD de 2011 calcula el Índice de Desigualdad de Género para todos los países del mundo. En un rango de 0 (el más igualitario) a 1 (el más desigual), Suecia ocupa el primer puesto (0,049) y Yemen, el último (0,769).
Las relaciones sociales entre hombres y mujeres se han configurado en torno al poder del varón, que ha dado un valor a las tareas asignadas a uno y otro sexo, quedando las mujeres relegadas a ámbitos de no liderazgo, de no participación, y cuyo trabajo no sólo no ha sido.
Con la llegada del capitalismo la situación ha empeorado. Por una parte, en nuestra sociedad supuestamente avanzada siguen existiendo actitudes arraigadas en el patriarcado, no sólo la violencia o la diferenciación de salarios, también estereotipos culturales, incluso en las propias mujeres. Por otro lado, el capitalismo ha aumentado la presión y explotación sobre países del Sur, cuyas víctimas son mayoritariamente mujeres.
¿Qué podemos hacer (o dejar de hacer)?
Informarnos, sensibilizarnos, debatir…
• Adquirir el hábito de observar nuestro vocabulario, expresiones, prejuicios… y sus posibles secuelas machistas.
• Escuchar sin prejuicios a toda mujer que exprese sus sufrimientos y sentimientos de discriminación.
• ¡No callar! Hablar sin vergüenza. Denunciar actitudes y acciones machistas. El silencio nos hace cómplices.
Y todo esto sin miedo a romper moldes culturales que son injustos. Con nuestra actitud estamos cambiando el mundo.
María dijo: «el Poderoso ha hecho obras grandes por mí. Su nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación». (Lc 1, 49)
María, que tu ejemplo nos ayude a defender la igualdad en dignidad y derechos de las mujeres.
Para profundizar
Informe “Publicidad machista. Análisis de publicidad y taller de creación contrapublicitaria“. ConsumeHastaMorir. (Se puede ver y descargar en PDF).
– “Tejer la vida en verde y violeta. Vínculos entre ecologismo y feminismo“. Ecologistas en acción. Cuad. nº13.
– “9 cosas que puedes hacer para evitar una situación de violencia machista (presente o futura)” Canal Solidario.
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