Un adulto y un menor sufren un trágico accidente pirotécnico mientras lanzaban cohetes en la procesión del Corpus Christi, en la que el adulto perdía la vida.
La iglesia Católica lamenta esta tristísima tragedia que acontecía en la procesión del Corpus Christi del pasado 11 de junio.
La explosión de los cohetes que llevaban en un triciclo que acompañaba a Jesús Sacramentado, causo la muerte de un feligrés y las graves lesiones que sufrió un menor de edad en Macuspana.
Tras la tragedia, la Diócesis de Tabasco, pide a los feligreses que dejen de utilizar pirotecnia en las celebraciones religiosas.
Son atractivos en las festividades, pero son peligrosos, agregó el sacerdote.
La Diócesis de Tabasco ora por la familia del hombre fallecido y pide por la pronta recueración del niño que también resultó gravemente herido en el accidente, al presentar quemaduras de segundo y tercer grado en el cuerpo.