El triste caso de Jessica Logan
Kathy Murphy
Revista “Acción Femenina” # 937
Menuda tarea que tenemos como padres hoy en día, no podemos quedarnos con la información de ayer, tenemos que tener nuestras antenas bien levantadas para saber qué es lo que ocurre con nuestros adolescentes y jóvenes.
La nueva forma de «divertirse» de los adolescentes se llama sexting, palabra que se deriva de sex: sexo, y texting: mensajes. Consiste en enviar al novio o novia sus fotos desnudo/a o semidesnudo/a a través del teléfono celular. Además de lo que implica en sí, el problema crece al exceder los límites ya que por jugar una broma o tomar una revancha se convierte en una humillación.
Debemos recordar que nuestro concepto y el concepto de nuestros adolescentes sobre la privacidad es diferente; ellos consideran que no hay nada malo en escribir acerca de sus actividades diarias en las redes sociales (Facebook, Hi5, MySpace, Twitter, etc.). Además, el adolescente, cuya mentalidad está en desarrollo, piensa que enviar este tipo de fotos no tiene ninguna consecuencia negativa; pero la realidad es otra.
LA FOTO CIRCULA SIN SU APROBACIÓN
A los jóvenes, que aún se encuentran descubriendo su sexualidad, les da pena preguntar a sus padres y experimentan con ella como pueden; en esta etapa el sexting suplanta el acercamiento físico por el estímulo visual. Pero a menudo, la situación se les va de las manos y lo que inició como una broma o lo que llaman, regalo de «amor», se convierte en humillación.
¿Por qué? Porque en muchas ocasiones las fotografías se reenvían sin la aprobación del afectado, y saltan de celular en celular, siendo distribuidas entre amigos/as de la misma escuela, las envían a una red social o a las páginas web extendiéndose como pólvora. Esto provoca que el material sea utilizado más adelante en su contra de diversas maneras: para chantajes, al ingresar a la universidad, o al solicitar el primer trabajo, porque su imagen no ha dejado de circular o alguien la guardó para luego hacer uso de ella. Recordemos que las fotos, una vez bajadas a Internet, es imposible retirarlas y borrarlas y cualquier persona del mundo puede tener acceso a ellas.
LA VIDA DE JESSICA CAMBIÓ
Un ejemplo es el caso de Jessica Logan, una joven de 18 años, alegre y divertida. Su vida se transformó completamente cuando la foto que le regaló a su novio, finalizó en manos de cientos de jóvenes de su ciudad natal; durante meses se enfrentó a insultos como «prostituta» y «reina del porno» en las redes sociales de MySpace y Facebook. Todo esto provocó que se volviera introvertida, pero también tuvo la valentía suficiente para aparecer en la televisión local con la finalidad de ponerse como ejemplo y que nadie más pasara por lo que ella sufrió. Sin embargo, unos meses más tarde, Jessica se ahorcó.
COMO PADRES ESTEMOS ALERTA
Esto no es para poner el grito en el cielo y alarmarnos, sino para llevarnos a la acción y seguir reforzando diariamente la comunicación con nuestros hijos, platicando con ellos acerca de esta «diversión» y de todas sus consecuencias. Además, es una tarea vital el aprender las nuevas tecnologías, en especial las relacionadas con las que manejan nuestros hijos.
Una de las mejores formas de establecer la comunicación, aunque nos resulte incomodo hacerlo, NO es dándoles un sermón o una cátedra acerca del tema. Podemos iniciar el diálogo con preguntas como: ¿Qué opinas acerca del sexting? ¿Conoces a jóvenes que lo hayan hecho? ¿Qué crees que pueda pasar si mandas una foto tuya indiscreta? Hay que explicarles que cuando se manda una foto suya por celular, están tomando la decisión de renunciar al control sobre sí mismos y sobre su imagen.
Necesitamos establecer límites, haciéndoles saber lo que consideramos que es apropiado y cuáles son nuestros valores, sin asumir que ellos saben lo que pensamos.
TODO ACTO TIENE CONSECUENCIAS
Conversemos acerca de la responsabilidad, que todos nuestros actos tienen consecuencias y que todo acto, por pequeño que sea, tiene repercusiones en cada una de las personas con las que interactuamos. Invitémoslos a que piensen en los demás, ya que podría estar avergonzando a sus padres, hermanos, amigos… Un joven responsable siempre piensa acerca de cómo sus decisiones afectan a los otros.
Platiquemos de la responsabilidad que tenemos ante Dios, de cuidar muy bien nuestro cuerpo porque es un templo sagrado. Que somos personas que tenemos un alma y lo que realicemos con nuestro cuerpo influye sobre nuestra alma y es por medio del cuerpo como vivimos las virtudes o caemos en los vicios
ES UN DELITO
Deben saber de los problemas legales y penales en los que pueden caer, por el simple hecho de crear o poseer tales imágenes pues el sexting se tipifica como pornografía y explotación sexual. Al que toma la fotografía se le considera como fabricante de material pornográfico y al que la reenvía, como distribuidor.
Los adolescentes creen que nadie se va a enterar y nunca los van a atrapar, y en muchos casos, ni siquiera tienen idea de que lo que están haciendo es un delito.
Pongámonos de acuerdo con ellos para que nos pongan en su lista de contactos de internet, y si vemos algo con lo que no estamos de acuerdo, conversarlo. Además veamos la forma de limitarles el número de contactos a unos cuantos amigos de confianza.
No permitir que los amigos utilicen alguna de las computadoras de la familia, porque juntos hacen cosas que solos no se atreverían a llevarlas a cabo.
Realicemos constantes inspecciones sorpresa para ver con quién están chateando, sus contactos, sus conversaciones; pidámosles nos enseñen sus mails (siempre con mucha discreción, respetando su intimidad). Sobre todo, establezcamos las reglas con anticipación, siendo firmes y no dejándonos influir por quienes dicen que estamos invadiendo su intimidad, porque lo que estamos haciendo es previendo y protegiendo su integridad.
PARA HABLAR CON LOS ADOLESCENTES
Reforcemos con ellos lo siguiente:
· Una vez que se has enviado una foto, no hay vuelta atrás; nada desaparece en el ciberespacio y se queda ahí por siempre.
· No tienes idea de la reacción que pueda tener la persona a la que le enviaste la foto.
· Si tu novio o novia te pide una foto inapropiada, dile NO. Una persona que realmente te quiere no te va a pedir algo que te haga sentir incómoda (o); pero tampoco tú pidas que lo hagan por ti. Nadie vale tanto como para poner en riesgo tu reputación.
· La intimidad se desvanece cuando envías fotos de desnudos. Tus fotos pueden ser compartidas con tus compañeros, puestas en internet donde todo mundo las pueda ver, esto incluye a amigos, papas, profesores…, pero también a policías, personal de ingreso a la universidad, o de selección de personal así como a quienes se dedican a la pornografía e incluso al chantaje.
· Piensa acerca de lo que tus compañeros van a decir acerca de ti a tus espaldas, recuerda que una foto «inofensiva», puede terminar con tu reputación.
· No existe nada completamente anónimo, tus fotos puedes ser rastreadas hasta dar contigo.
· Te pueden arrestar, culpar y condenar por poseer y distribuir pornografía infantil, aunque la foto sea tuya.
· Si alguien te manda una foto suya, no la distribuyas, esto es un delito.
· Si compartes tus fotos con alguien que no conoces en Internet, existe la posibilidad de que lo estés haciendo con un pederasta, y pueda utilizarlas para chantajearte y hacer que hagas cosas que tú no quieres, AF
Señor:
Te pido por nuestros hijos,
sabiendo que nos has
confiado la tarea de cuidarlos,
protegerlos, educarlos,
guiarlos y amarlos.
Te suplico nos des la luz
para cuidar de tu obra,
que los protejas de todo mal,
y que sean portadores de tus
enseñanzas y amor.
Te pido que con su diario
actuar den testimonio de un
Padre amoroso, misericordioso
y todopoderoso.
Padre, gracias por darnos
la oportunidad de tenerlos
a nuestro lado, amarlos y
ponerlos en tus manos.
Amén.
En la página de Internet de You Tube, puedes encontrar un video en el que habla la mamá de Jessica.
http://www.youtube.com/watch?v=VLTj3WBmY1k.
Está en inglés. ¡Valdría la pena que lo vieran tus hijos!