¿Qué gano o pierdo rezando?
Gano en paz, pierdo violencia.
Gano generosidad, pierdo tacañería.
Gano en compañía, pierdo soledad.
Gano valor, pierdo cobardía.
Gano cielo, pierdo tierra.
Gano ilusión, pierdo tristeza.
Gano fe, pierdo incredulidad.
Gano esperanza, pierdo apatía.
Gano hermandad, pierdo egoísmo.
Gano humildad, pierdo vanidad.
Gano sinceridad, pierdo mentira.
Gano transparencia, pierdo suciedad.
Gano autenticidad, pierdo falsedad.
Gano a Dios, pierdo al demonio.
No es cuestión de saber lo que gano
rezando, sino lo mucho y malo
que pierdo rezando.
Ese lugar, el más tranquilo, es Dios.
Ese lugar, el más seguro, es Cristo.
Ese lugar, el más indicado, es el Espíritu.
Ese lugar, el más garantizado, es la fe.
P. Javier Leoz