“La voz del Papa”
Jose Lopez Colin*
1) Para saber
En una entrevista al papa Francisco le preguntaban sobre cómo su espiritualidad le ayuda ahora a vivir su ministerio petrino. El Papa respondió que una de las cosas que aprendió de San Ignacio de Loyola, fundador de los jesuitas, es a discernir. El discernimiento “es un instrumento de lucha para conocer mejor al Señor y seguirlo más de cerca”.
En efecto, para saber qué decisiones tomar, qué cosas hemos de hacer, de qué manera llevarlas a cabo, es preciso reflexionar. Dice el Papa que él desconfía de las decisiones tomadas precipitadamente, decididas de improviso: “Desconfío de mi primera decisión, es decir, de lo primero que se me ocurre hacer cuando debo tomar una decisión. Suele ser un error. Hay que esperar, valorar internamente, tomarse el tiempo necesario”.
2) Para pensar En ocasiones podemos encontrarnos ante noticias que suscitan confusión y mucha habladuría; sobre todo porque algunas no nos constan que sean verdaderas. Recientemente la Santa Sede tuvo que desmentir unas declaraciones que se le asignaban al Papa.
Hay una anécdota que se le atribuye a Sócrates, llamada Las tres bardas, que nos puede ayudar a aprender a ser prudentes antes aceptar un juicio o una crítica.
Sucede que un discípulo llegó muy agitado a la casa de Sócrates: “Maestro, quiero contarte cómo un amigo tuyo estuvo hablando de ti cosas malas y con malevolencia…” Sócrates, no dejándose llevar por la curiosidad, lo interrumpió diciendo: “¡Espera! ¿Ya hiciste pasar a través de las tres bardas lo que me vas a decir?”
“¡¡¿Las tres bardas?!! No sé de qué me estás hablando”, respondió el amigo. “¡Sí!”, replicó Sócrates: “La primera barda es la verdad. ¿Ya examinaste cuidadosamente si lo que me quieres decir es verdadero en todos sus puntos?”
“Pues la verdad es que no. Lo que pasa es que se lo oí decir a unos vecinos…”
Sócrates continuó: “Pero al menos lo habrás hecho pasar por la segunda barda que es la bondad. Es decir, ¿piensas que lo que me quieres decir es por lo menos bueno?” Respondió rápidamente su amigo “¡No!, en realidad no. Al contrario…”
“¡Ah! –interrumpió Sócrates–, entonces vamos a la última barda… ¿Es necesario que me cuentes eso?”
“Para ser sincero, no… necesario no lo es…” reconoció su amigo.
“Entonces, ¡si no es verdadero, ni bueno, ni necesario…! Sepultémoslo en el olvido…”, y se retiró alegre y tranquilamente el filósofo ateniense.
Pensemos si somos prudentes y reflexionamos antes de aceptar comentarios negativos sobre los demás.
3) Para vivir
Pero antes del discernimiento, está la escucha. El papa Francisco invita a saber escuchar, pues no siempre es fácil. Es más cómodo hacerse el sordo y distraerse en tantas cosas. Escuchar es atender, querer entender, valorar, respetar. Se escucha para amar, para entrar en diálogo. El escuchar mismo es un don que hay que pedir y ejercitarse en él.
A quien primero hemos de saber escuchar es a Dios mismo. Dice el Papa que la Virgen María es experta en todo ello: Como nadie hizo de su vida una escucha de Dios y una mirada pronta a las necesidades de los demás. Por ello podemos pedirle nos enseñe a tener los oídos del corazón atentos para saber discernir la voluntad de Dios.
*El autor es sacerdote, ingeniero en Computación por la UNAM y Doctor en Filosofía por la Universidad de Navarra. Fecha de Publicación: 27/07/2014 1 2 3 4 5