VÍDEOMENSAJE del PAPA FRANCISCO a los marineros y trabajadores del mar.
Queridos hermanos y hermanas:
Estos son tiempos difíciles para el mundo porque nos enfrentamos al sufrimiento causado por el coronavirus.
Vuestro trabajo como marineros y pescadores se ha vuelto aún más importante, para proveer a la gran familia humana de alimentos y otros géneros de primera necesidad. Os estamos agradecidos.
También porque sois una categoría muy expuesta. En los últimos meses vuestra vida y vuestro trabajo han cambiado considerablemente y os habéis enfrentado —y todavía os enfrentáis— a muchos sacrificios, a largos períodos de alejamiento a bordo de los barcos sin poder bajar a tierra.
La lejanía de la familia, los amigos y el propio país, el miedo al contagio, todos estos elementos son una pesada carga de llevar, ahora más que nunca.
Me gustaría deciros: sabed que no estáis solos y que no estáis olvidados. Vuestro trabajo en el mar a menudo os mantiene alejados, pero estáis presentes en mi oración y en mi mente, así como en la de los capellanes y voluntarios de “Stella Maris”.
El mismo Evangelio nos lo recuerda cuando nos habla de Jesús con sus primeros discípulos, que eran todos pescadores, como vosotros. Hoy deseo enviaros un mensaje y una oración de esperanza, una oración de alivio y de consuelo contra toda adversidad. Al mismo tiempo, animo también a todos los que trabajan con vosotros en el apostolado del mar.
Que el Señor bendiga a cada uno de vosotros, bendiga vuestro trabajo y a vuestras familias; y que la Virgen María, Estrella del Mar, os proteja siempre. Yo también os bendigo y rezo por vosotros. Y vosotros, por favor, no os olvidéis de rezar por mí. Gracias.