(Desde El Cañamelar, José Ángel Crespo Flor: texto y foto).- Ya han transcurrido 10 dias, los diez primeros días de 2010, desde que la Hermandad se propuso mantener encendida la Luz de la Paz de Belén 125 días para conmemorar así el 125 aniversario de la primera salida oficial del Santísimo Cristo de los Afligidos. Hecho que tuvo lugar en 1885 con ocasión de la terrible cólera que sembró de luto y dolor todo el Marítimo.
Fuentes de la Hermandad señalaron que “a través de estos gestos son por los que tienen que conocer las nuevas generaciones lo qiue ocurrió en El Cañamelar -entonces Pueblo Nuevo del Mar- en 1885, con ocasión del Cólera. Así, los que tengan alma de investigadores podrán investigar quien fue, por ejemplo el padre Luis Navarro o quien era el Dr. Lluch, personas que tuvieron mucho que ver con aquella epidemia así como el mismísimo Dr. Ferrán. Además …un aniversario de esta embergadura dura todo un año y aunque nuestro fuerte sea la Semana Santa y, en particular la Semana Santa Marinera de Valencia (SSMV), no por ello debemos de abstenernos de publicitar aquel hecho durante todo este 2010. Estos gestos sirven precisamente para eso, para mantener viva la llama – nunca mejor dicho- de este 125 aniversario de la primera salida oficial del Santísimo Cristo de los Afligidos durante todo el año”.
Las mismas fuentes indicaron que “la verdad es que al tener en nuestro local la Luz de la Paz de Belén ha sido relativamente sencillo iniciar este ‘maratón luminoso’. Tan solo hay que tener cuidado, estar al tanto y vigilar que la Luz de la Paz de Belén no se termine. Y la verdad, eso es relativamente sencillo. Además, el intento merece la pena y la efemérides también”.
La fecha de finalización de easte ‘maraton luminoso’ coincide con el primer domingo de mayo aunque tal vez “se amplie una semana mas para que dure hasta el segumndo domingo de Mayo, fiesta de la Virgen de los Desamparados y advocación que tiene mucho que ver con aquella epidemia porque los que murieon fueron unos ‘desamparados” en el amplio sentido de la palabra y porque León XIII, por aquel entonces Papa, mandó una Bula, en ese 1885, en que se reconocía a la Virgen de los Desampareados como Patrona de Valencia y su Reino. Conviene destacar el hecho de que la Virgen de los Desamparados salió por el Centro en rogativas para que el Cólera terminase lo más pronto posible mientras que aquí, en El Cañamelar (Pueblo Nuevo del Mar), fue el Santísimo Cristo de los Afligidos quien, con su presencia fisica, llevó alivio y esperanza a los afectados por el terrible mal. Su salida marcó dos hitos. Que el Cañamelar lo tuviese y lo tenga como patrono y que el entonces párroco del Rosario, el Padre Luis Navarro, fuese galardonado con la Cruz de la Beneficencia por la Diputación de Valencia. Dos hitos que ahora, 125 años después, queremos significarlos, actualizarlos y publicitarlos, sobre todo para conocimiento de las nuevas generaciones”.