Saber elegir
Saber elegir es una de las claves
de una vida bien vivida y, por lo mismo,
de la felicidad que todos anhelamos.
Dios nos dio el inmenso poder de elección
y nuestra vida depende de las decisiones
que tomamos o dejamos de tomar.
También la indecisión es una decisión.
El indeciso elige no decidir y sufre
las consecuencias de su incertidumbre
o sus temores.
El gran motivador Og Mandino dedica
una buena parte de su fascinante libro
El Milagro más grande del mundo
al poder de elección.
A todos nos conviene practicar
la ley del éxito que él expresa así:
Usa sabiamente tu poder de elección.
En efecto, la libertad sólo nos dignifica
cuando la sabiduría ilumina nuestras
decisiones según el bien y la verdad.
Para saber elegir es necesario orar,
pedir a Dios discernimiento, contar
con buenos amigos y con buenos
guías y actuar con humildad.
Saber elegir implica saber meditar,
actuar con rectitud, dejarse guiar
por el amor y tener atrevimiento.
Saber elegir es armonizar libertad
y responsabilidad.
Saber elegir es saber vivir.