(Desde El Cañamelar, José Ángel Crespo Flor).- El Secretariado Diocesano de Misiones de Valencia no se cansa de pedir que no se tiren los sellos usados, que, a través de estos, se pueden paliar y de hecho se palian muchas necesidades que tienen los misioneros pues bien, desde hace unos años la Hermandad que tiene por Titular a quien es considerado por todos, desde este 2010, como Señor, Patrono y Protector del Cañamelar, el Cristo de los Afligidos, se ha propuesto ayudar, con esta forma tan sencilla, a los misioneros. Para ello solicita de los vecinos que no tiren los sellos y que cuando pasen por el local social de este colectivo (Calle José Benlliure, 92) los depositen en el buzón de la Hermandad. «Es una forma muy sencilla de vivir el Adviento y la Natividad del Señor. Una forma sencilla, muy humana y muy solidaria -señalan desde este colectivo del Cañamelar que tiene entre sus proyectos solidarios el ayudar a las Misiones y a los misioneros- por lo que animamos a nuestros vecinos del Cañamelar a que no tiren los sellos usados y los pongan en el buzón que tiene la Hermandad. Y aunque no importa tanto el número como el detalle bien está que quienes nos lean sepan que esta misma semana se ha entregado al secretariado diocesano de Misiones 275 sellos usados para que se animen y nos copien porque en estas fechas existe un envío constante de cartas para felicitar en el próximo nacimiento de Jesús. Pues bien, antes de tirar a la basura los sobres recorten los sellos y guárdenlos o, si lo prefieren, nos lo dejan en el buzón porque nosotros le aseguramos un buen uso y desde luego, estos sellos, que a menudo se tiran, sirven para mejorar el ‘día a día’ de nuestros misioneros a los que si siempre hay que tenerlos muy presentes mucho más en estas fechas tan señaladas».
Fuentes del citado colectivo semanasantero, que tiene su sede en la parroquia Nuestra Señora del Rosario del Cañamelar (Valencia), señalaron también que «se trata de una forma muy sencilla, muy de ‘andar por casa’, este tipo de ayuda pero desde el Secretariado Diocesano de Misiones de Valencia se agradece mucho porque los que,a diario trabajan allí capitaneados por el sacerdote D. Miguel Palacios, saben mejor que nadie lo que puede representar la venta de estos sellos usados entre los coleccionistas y el beneficio que su venta produce para paliar la escasez de recursos con lo que a diario tienen que trabajar los misioneros valencianos para llevar La Palabra de Dios allí donde no se conoce nada de Dios» (Ver también en: apuntesdelcanyamelar.blogspot.com)