Historia para reflexionar titulada «El PESO de la CRUZ», una buena forma de entender como cada uno de nosotros debemos cargar con nuestra cruz.
El peso de tu Cruz | Reflexiones de la vida
Un hombre sentado en su cama pensaba en los problemas que tenía.
No estaba pasando por una buena situación, para él era como cargar una pesada cruz por el camino.
Después de pensar un rato se quedó dormido y tuvo un sueño muy relacionado con lo que pensaba.
Se encontraba en un camino con una cruz cargada en su hombro, era bastante pesada.
Señor, mi cruz es demasiado pesada, ayúdame – dijo el hombre mirando al cielo.
En eso apareció un ángel que le enseñó una puerta y le dijo:
Entra allí, deja tu cruz y toma otra para el resto del camino.
Y así lo hizo el hombre. Entró por la puerta y dejó su cruz a un lado. Allí había muchas cruces, todas de diferentes tamaños.
El hombre exploró todo el lugar en busca de una cruz, vio unas muy grandes y otras demasiado pequeñas.
Lógicamente no iba a tomar una más grande, pero tampoco quería una muy pequeña, no quería decepcionar a Dios.
Le tomó algo de tiempo hasta que encontró una que le parecía perfecta, no era ni muy grande ni muy pequeña. Era algo pesada, pero ligera en comparación con las otras.
Decidido, me llevo esta – Dijo el hombre al ángel.
El ángel le dijo:
Buena elección ¿pero sabes algo? Esa es la misma cruz que dejaste al entrar.
El hombre despertó y se dio cuenta que después de todo sus problemas no eran tan grandes, agradeció a Dios por su lección.
Cuando tengas problemas y pienses que son muy grandes, mira a tu alrededor y notarás que algunas personas se enfrentan a problemas más grandes.
Recuerda que después de una gran tormenta viene la calma, carga tu cruz confiando en Dios, que él te ayudará.
Narración: Liliana Gonzalez