LA SAGRADA FAMILIA DE JESÚS, MARÍA Y JOSÉ
PREPARACIÓN:
Antes de la salida del celebrante y de los ministros hacia el exterior del templo
Hoy la Iglesia universal festeja la Fiesta de la Sagrada Familia de Nazaret: Jesús, María Santísima y San José, que vivieron en aquel pequeño pueblo hace veinte siglos, pero que es el ejemplar de todas las familias, de todos los tiempos. Ella, que es ícono y modelo de toda familia humana, nos ayuda a cada uno a caminar con el espíritu de Nazaret.
Y hoy también, en vísperas del último día de este año del Señor 2013, vamos a dar gracias, junto con nuestras familias, por todo lo que hemos vivido a lo largo de él, ya que todo es realmente una gracia que proviene de Dios.
AMBIENTACIÓN:
Luego del saludo inicial y antes del acto penitencial
El Hijo de Dios hecho hombre, a quien adorábamos en el humilde pesebre, forma parte de una familia; familia que Él mismo nos pone como ejemplo, como ideal de toda familia humana; ejemplo de obediencia a la ley, ejemplo de amor y de unidad. y Él nos dice hoy: puedo vivir en cualquiera de las familias de ustedes. Y necesitamos que él venga a vivir en cada una de nuestras familias, así realmente podremos vivir, nosotros y el mundo entero, en paz.
1ª. LECTURA: (Eclo. 3, 3-7. 14-17a) (Ver texto)
En cada época los creyentes han debido esforzarse por hallar el modo de ser fieles al Señor en cada realidad de su vida. Y de un modo muy especial en algo tan importante como es la vida familiar.
SALMO RESP.: (127, 1-5) (Ver texto)
R. ¡Felices los que temen al Señor y siguen sus caminos!
2ª. LECTURA: (Col 3, 12-21) (Ver texto)
San Pablo nos habla de cómo deberían ser las relaciones entre nosotros. Y al final añade una aplicación de todo esto a la vida familiar, tal como se vivía en su tiempo.
EVANGELIO: (Mt 2, 13-15. 19-23) (Ver texto)
En el santo Evangelio se nos muestra Jesús, el Hijo de Dios, asumiendo la realidad de la familia, con todas sus consecuencias.
ORACIÓN DE LOS FIELES:
CELEBRANTE:
Como verdaderos hijos de Dios y hermanos los unos de los otros, dirijamos nuestra plegaria a Dios Padre por la gran familia universal.
GUÍA: A cada una de las peticiones responderemos orando:
«SEÑOR, QUE NUESTRAS FAMILIAS SEAN EJEMPLO DE AMOR»
v Padre, al pedirte por la Santa Iglesia y el Santo Padre Francisco, para que todo el mundo reciba su mensaje de paz, esa paz que tu Hijo nos trajo con su nacimiento, te pedimos…
v Padre, porque queremos que nuestra gran familia diocesana crezca en la imitación de la Sagrada Familia, viviendo auténticamente el Evangelio de tu Hijo, te pedimos…
v Padre, para que en todos los hogares de nuestra Patria se busque el perdón, el amor,la comprensión, el crecimiento y la gratuidad, y así tu Hijo pueda vivir en cada una de ellas, te pedimos…
v Padre, queremos que tantas familias necesitadas, sufrientes, que carecen de lo indispensable para vivir dignamente, descubran tu amor en nuestra solidaria entrega y así renazca en ellos la esperanza, te pedimos…
v Padre, para que nuestras familias sean comunidades de fe, en las que se enseñe que el cielo es el hogar definitivo; que existe un Padre que nos ama con locura; un Hijo que murió por salvarnos y un Espíritu que nos anima y nos empuja para ser buenos cristianos, te pedimos…
CELEBRANTE:
Acepta, Padre bueno, las oraciones que te presentamos como familia reunida en tu nombre, y derrama la abundancia de los dones de tu Espíritu para que, dóciles a su voz, reine en todas las familias la paz y la concordia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS:
Junto a estas ofrendas, ofrezcámosle a Dios, nuestro Padre, nuestras familias, en un sincero compromiso de que en ellas se vivan ejemplos preclaros de virtudes domésticas.
Al término del “Lavatorio de Manos” y cuando el celebrante vuelve al centro del altar y antes de la oración siguiente, se hace poner de pie a la asamblea
DIÁLOGO DEL PREFACIO:
Al iniciarse el Prefacio (antes de «El Señor esté con vosotros»)
Demos gracias a nuestro Padre del Cielo, que al darnos a su Hijo en el seno de la Sagrada Familia, nos dio el modelo para que, con nuestras familias, pudiésemos alcanzar la vida eterna.
COMUNIÓN:
Jesús quiere vivir en cada uno de nosotros, en cada una de nuestras familias, para construir en ellas una verdadera familia, portadora de paz y amor para todas las demás y para todo el mundo, por eso ahora se nos da como verdadero Pan de Vida.
DESPEDIDA:
Que la Sagrada Familia, en este tiempo de Navidad, nos haga descubrir el orgullo de ser católicos; la gracia de ser cristianos y la alegría que se siente cuando se cumplen los designios de Dios.