Guadix, 30 de Marzo de 2010
A SU SANTIDAD BENEDICTO XVI
PALACIO APOSTÓLICO
00120 CIUDAD DEL VATICANO
Beatísimo Padre:
Esta mañana, en la Catedral de esta diócesis de Guadix, en España, hemos celebrado la Misa Crismal, mi primera Misa Crismal como Obispo. En ella hemos pedido al Señor muy especialmente por el Papa y sus intenciones.
Esta iglesia apostólica ha tenido siempre como seña de su identidad la fidelidad a la Sede romana, a San Pedro y sus sucesores.
En estos días vivimos con verdadero dolor los numerosos cuestionamientos y críticas que se vierten sobre Su persona. Nos sentimos perplejos ante estas condenas injustificadas al que es Pastor de la Iglesia universal. Sabemos que en las críticas al Papa se quiere poner en cuestión la credibilidad de la misma Iglesia. Ahora, más que nunca, nos sentimos inmensamente gozosos de ser cristianos, miembros de la Santa Iglesia.
Santo Padre, la Diócesis de Guadix, su Obispo, el Presbiterio, los miembros de los institutos de vida consagrada y las sociedades de vida apostólica, con todo el Pueblo de Dios, quieren manifestarle su inquebrantable adhesión y una renovada fidelidad al Sucesor de Pedro. Estamos con Pedro, estamos con Vuestra Santidad.
Santidad, le pedimos que siga orientándonos con su palabra y confirmándonos en la fe; sabemos que con Pedro siempre viviremos en la verdadera fe; que en comunión con el Vicario de Cristo nuestras vidas y nuestras iglesias serán fecundas.
En estos días en que celebramos la Pascua del Señor encomendaremos de un modo especial a Vuestra Santidad y sus intenciones. Cuente con nuestra pobre oración.
Humildemente le pedimos su Bendición apostólica.
+ Ginés García Beltrán
Obispo de Guadix