“Pidamos a Dios por nuestra patria, para que ilumine a todos. Que nos fortalezca y nos una; pero no caigamos en ese canto de sirena de la violencia”, exhortó el Cardenal Juan Luis Cipriani ante los actos de violencia acontecidos en la últimas semanas en el interior del Perú. Estas invocaciones las realizó en la Misa que presidió en la Basílica Catedral, el 27 de noviembre, Primer Domingo de Adviento.
“Nunca vayas por el camino de la violencia. Unidos colaboremos unos con otros. El progreso personal es gradual. Las revoluciones solo llevan al retraso porque es la soberbia del que quiere ser como Dios”, mencionó el Arzobispo de Lima.
“Cuando a veces por la violencia se quiere generar esa ilusión falsa, se corta la esperanza y el futuro. ¡Abramos el alma! con honradez. El futuro es lucha, esfuerzo, paz, valores cristianos, y para todo eso hermanos dejemos que la luz de Cristo ilumine nuestro pensamiento ético”, prosiguió.
El Cardenal Cipriani también pidió a todos los peruanos reflexionar sobre la importancia de mantenernos unidos para colaborar con los compatriotas más necesitados, generar trabajo, mejorar la salud, construir carreteras y ayudar a quienes no tienen viviendas.
“Todos ello es laborioso, pero unidos y poco a poco. Ruega a Dios que te conceda la sabiduría para que seas promotor del futuro de tu familia, institución y pueblo. Sé un servidor de la esperanza. Esta tierra es un lugar de trabajo, esfuerzo, solidaridad, generosidad y de permanente esfuerzo cada día”, señaló.
Bomberos voluntarios: ejemplo de servicio
Una numerosa delegación del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú participaron de la Misa dominical en el marco de las conmemoraciones por su 151 aniversario de fundación.
“El servicio que prestan refleja para todo el país un ejemplo. Junto al buen servicio que brindan también generan una imagen de solidaridad y amor al prójimo que siempre deben cuidar. Que Dios los bendiga, los proteja y los mantenga en todo el Perú dando ese ejemplo de servicio, que es una responsabilidad”, reflexionó.
Adviento: tiempo de espera a la Navidad
Finalmente, el Pastor de Lima recordó que el tiempo de Adviento (los cuatro domingos anteriores a la Navidad) nos permite hacer un examen de conciencia preparando el alma para la Navidad. “Este mensaje de esperanza te da una gran energía, estimula tu inteligencia porque esperar a Jesús es redoblar la actividad: más empuje, paciencia, trabajo, perdón y cariño”, culminó.
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