Mañana 20 de diciembre, IV Domingo de Adviento, el Pastor de Lima celebrará la Santa Misa en la Basílica Catedral a las once de la mañana
El Cardenal Juan Luis Cipriani en su programa Diálogo de Fe del sábado 19 de diciembre, dio gracias a Dios por la decisión del Papa Benedicto XVI de proclamar hoy venerables a Juan Pablo II y a Pío XII, al aprobar el decreto que reconoce las “virtudes heroicas del Siervo de Dios» Karol Wojtyla y Eugenio Pacelli, primer paso hacia la santificación de los dos pontífices.
El Arzobispo de Lima señaló que el Santo Padre ha reconocido que la vida de Juan Pablo II estuvo llena de virtudes y actos heroicos. “Hay algo en su vida que va más allá de la persona solamente buena, es decir, Dios estaba siempre con Él”.
“Ahora lo que hace falta es un milagro demostrado y estudiado para proclamarlo. Con esto la Iglesia ya habló, ahora se espera que hable Dios y nos diga que el Papa Peregrino estuvo unido siempre a Él”, añadió.
El Cardenal Cipriani mencionó que hay muchos santos por las calles y que no tienen un proceso en Roma, pero Juan Pablo II se lo merece porque fue el gran papá del mundo entero, el gran líder y el gran amigo. “El hombre que sembró amor por todos partes y la ilusión de vivir mejor”.
También indicó que el mismo proceso de reconocimiento de virtudes heroicas, el Santo Padre ha incluido al Papa Pío XII, que también fue un hombre grandioso.
El Pastor de Lima afirmó que la Iglesia sigue caminando para decirnos ¿Qué es lo que hace Jesucristo? Él a lo largo del tiempo se va presentando a través de personas y cuando estas son generosas y aceptan las invitaciones de Dios, se convierten en santos.
“Sigue siendo un padre de familia, un campesino, un joven casado o soltero. Sigue siendo el mismo, pero sus obras, sus palabras, sus gestos y su corazón nos dicen que esta persona esta muy cerca de Dios, por eso lo llamamos santos. No es un anormal, sino muy humano para poder ser divino”.
El Arzobispo de Lima comentó que en febrero del próximo año se cumplirán veinticinco años de la visita de Juan Pablo II al Perú, “y estoy seguro que organizaremos un homenaje bonito para que todo el pueblo peruano recuerde esos cinco días en que el Papa Peregrino visitó diversas provincias del Perú; y, en el que el país entero estuvo dando vueltas alrededor de ese hombre maravilloso”, expresó.
Cariño y bendición al pueblo ayacuchano
En otro momento, al comentar sobre las intensas lluvias y huaycos que vienen azotando al pueblo de Ayacucho, el Cardenal Juan Luis Cipriani les envío su cariño y la bendición de Dios para que no se desesperen.
“Desde aquí, una oración, en este momento cercano a la Navidad, les digo a todas esas familias que no pierdan la paz y la esperanza, porque estamos todos muy cerca queriendo ayudar, pero son días en que no se ve una respuesta inmediata”, expresó.
Darle nuestro tiempo a Dios, el gran regalo de Navidad
Por otro lado, el Pastor de Lima manifestó que hoy la humanidad no se atreve a enfrentarse con Dios, cara a cara; y, esto pasa porque la gente tiene guardadas cosas que no quiere cambiar.
“Jesucristo no entrará en nuestro corazón si es existe odio, venganza, impurezas e injusticias. Por eso, este festejo y jolgorio de la navidad es la parte externa, pero también Jesús viene para anunciarnos que todo ese mal que tenemos, Él nos lo perdona”, agregó.
El Cardenal Cipriani mencionó la importancia de rescatar la dimensión espiritual de la Navidad, porque la dimensión material está muy desarrollada. “Nunca he visto tantas campañas de marketing y ventas; y, tampoco me parece bien que los padres de familia se olviden de decirles a los hijos que esos regalos vienen de Jesús, que son una señal del amor que les tiene”.
“Por eso, el gran regalo que Jesús nos pide en esta Navidad es darle nuestro tiempo. Simplemente nos necesita a cada uno, quiere unos minutos para poder hablarnos, ayudarnos y poder conversar con nosotros”, concluyó el Pastor de Lima.
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