El Cardenal Juan Luis Cipriani exhortó a sacerdotes, religiosos y fieles a formar parte de la campaña en favor de nuestros hermanos del interior del país que vienen sufriendo por el friaje, en la Santa Misa que presidió en la Basílica Catedral de Lima el domingo 25 de julio, XVII del tiempo ordinario.
Durante su homilía, el Arzobispo de Lima animó a todos los fieles a orar siempre y pedir por los demás, en especial por aquellos que se encuentran sufriendo por el friaje en nuestro país, por aquellos que están en los hospitales y por aquellos jóvenes que necesitan de una guía.
“Si todos rezamos unos por otros, Dios se conmueve. Dios va cambiando. Es así que si vas teniendo un diálogo con Dios, estás aprendiendo a rezar”, prosiguió.
Recordó que con Jesús se puede hablar en cualquier momento y en cualquier lugar, sólo basta elevar el corazón y la mente, incorporándolo en la conversación y en el pensamiento, ya que no hay nadie que nos quiera más que Él.
“Que bueno sería que hoy hagamos ese propósito. Ten una palabra de amistad con Jesús. Si estás preparado acércate a comulgar, acércate a la confesión, reza tu Rosario o háblale de manera espontánea. Él quiere ser tu amigo”, reflexionó.
En otro momento, mencionó que en el mundo de hoy la oración es una de las grandes urgencias, ya que se reza poco. Por tal motivo es muy importante mantener la fe y la humildad, dejando de lado los egoísmos y pidiendo siempre al Señor: “Enséñanos a orar”.
“Ten fe. Es una condición importantísima para la oración. Dios te escucha, te conoce, te ve, pero quiere que tu libertad se dirija hacia Él, no quiere imponerse, quiere escuchar de tu voz lo que quieres, lo que te pasa, por quien quieres rezar”, señaló.
Finalmente, el Pastor de Lima pidió a todos los fieles a sumarse a la campaña en favor de nuestros hermanos del interior del Perú que vienen sufriendo por el friaje, acercándose a las parroquias o a Caritas llevando ropa y prendas de abrigo en buen estado.
En la Santa Misa estuvieron presentes neófitos, recientemente iniciados en la vida de la Iglesia, a quienes exhortó a mantener esa amistad con Jesús y conservar en su vida esa cercanía con Dios. Del mismo modo, agradeció a un grupo de voluntarios de España y Estados Unidos, quienes se encuentran en nuestro país para ayudar y colaborar con los más necesitados.