Bienvenido Adviento: Un Tiempo de Esperanza y Salvación
El Adviento es mucho más que un tiempo de espera; es un tiempo de preparación, vigilancia y esperanza. Dios viene a nuestro encuentro, y necesitamos estar atentos a Su llegada. En este mundo lleno de contiendas, ansiedades, corrupción e inestabilidad, somos llamados a ser buenos vigilantes, hombres y mujeres que alzan su mirada más allá del materialismo y el sensacionalismo.
Dios que Salva
En este tiempo de Adviento, recordemos que Dios viene a salvarnos, a liberarnos de lo que atraganta nuestra felicidad y nos deja vacíos. Mientras el hombre se empeña en engrandecerse, Dios se hace pequeño en la Navidad. En Jesús, podemos abrazarlo, amarlo, tocarlo, besarle y adorarlo.
Un Tiempo de Esperanza
El Adviento entra por las ventanas y balcones de nuestros corazones. Es tiempo de mantenernos vigilantes, de no bajar la guardia ni alejarnos de nuestra fe. Necesitamos el Adviento porque vivimos en un déficit de esperanza. Cuántas luces iluminan las calles y, sin embargo, muchos no saben ni por qué ni por quién las encienden.
La Llegada del Señor
El Adviento nos reúne como un niño que une a la familia alrededor de una mesa y nos hace creer que el mundo aún tiene solución. Es Dios quien llega en persona. Por eso, prepárate: ¡Dios viene a tu encuentro!
Reflexión basada en la prédica del Padre Javier Leos