Reunidos en la Ciudad de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, el Consejo Nacional de Laicos, que representa a millones de laicos organizados en México, en el marco de nuestra XXVII Asamblea Nacional, manifestamos lo siguiente:

En las últimas semanas, los acontecimientos en nuestro país han evidenciado los altos niveles de violencia y desprecio por la ley, la dignidad de las personas y la vida humana. Asesinatos de defensores de derechos humanos, periodistas y sacerdotes, asaltos y robos, confrontaciones entre grupos criminales y las fuerzas del orden, secuestros, desapariciones, extorsiones y actos de corrupción llenan los noticieros y medios de comunicación. Como pocas veces, nos enfrentamos a un escenario de crisis simultánea de las instituciones gubernamentales, comunitarias y familiares que habían mantenido la cohesión social en el pasado. Al mismo tiempo, las instituciones y actores políticos, que deberían coordinar los esfuerzos del Estado, la sociedad y la economía para enfrentar estas problemáticas, se muestran sin la legitimidad necesaria para desempeñar adecuadamente sus funciones.

Ya es hora de que los ciudadanos despertemos y respondamos a nuestro compromiso para transformar la realidad, construyendo ciudadanía participativa que inyecte nueva vida a la política, para que ésta vuelva a ser un instrumento eficaz para resolver problemas concretos y para generar nuevas oportunidades, privilegiando la promoción y defensa de la vida y la familia. Los mexicanos exigimos tener políticos, autoridades, funcionarios y servidores públicos confiables, cuyas decisiones y actuación tengan como principal preocupación el bien de todos. Esto es especialmente apremiante en el Estado de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz, en donde se desarrollarán elecciones próximamente, presentándose una oportunidad invaluable para participar e incidir en el cambio que necesitamos, mediante el ejercicio democrático de nuestro voto, de manera informada y responsable.

El Consejo Nacional de Laicos integrado por ciudadanos y laicos comprometidos con nuestra realidad hacemos un llamado, aquí y ahora, a todos los tomadores de decisiones en instituciones gubernamentales y no gubernamentales, para reconocer la gravedad de nuestra situación y actuar en consecuencia respondiendo al sufrimiento del pueblo. Del mismo modo pedimos a todos los ciudadanos y en particular a los laicos católicos asuman su compromiso y participen activamente en todos los ámbitos en los que se desenvuelven para transformar la realidad actual. Como nos recordaba el Papa Francisco en su visita a nuestro país, “cada sector tiene la obligación de velar por el bien del todo: todos estamos en el mismo barco”1. Una preocupación efectiva por el bien propio, y el de los demás, es indispensable para salir de esta situación. Si no cambiamos y aprendemos a cooperar y a ayudarnos los unos a los otros, el país no tendrá futuro.

A pesar de estas grandes dificultades, los laicos de México miramos con confianza a nuestro país. No tememos, como quien no tiene fe ni esperanza (1 Ts, 4,13), pues miramos a Dios quien nunca abandona a su pueblo. Él nunca nos olvida (Is, 49,15), especialmente cuando pasamos por pruebas. Somos un pueblo que de la mano de la Santísima Virgen María de Guadalupe hemos sabido levantarnos. Desde esta confianza, exhortamos para que cada uno(a) de nosotros(as), desde su contexto y con una participación activa y responsable, logremos transformar nuestra realidad y hacer de México un lugar de Paz, Fe y Esperanza.

CONSEJO NACIONAL DE LAICOS DE MEXICO. Jorge C. Estrada Avilés. Presidente Mesa Directiva 2016-2019 cnl.directiva@hotmail.com

¹ S.S. Francisco, Discurso en el Encuentro con el mundo del trabajo, Ciudad Juárez, Chihuahua 17.02.201

Fuente: http://cem.org.mx/prensa/1062-%C2%A1Transformar-la-realidad-esta-en-nuestras-manos!.html