La presidenta del Parlamento Vasco Arantza Quiroga felicita a la Hermandad del Cristo de los Afligidos

(Desde El Cañamelar, José Ángel Crespo Flor).- Las felicitaciones de Navidad son un buen baremo para medir la catadura moral de las personas. Al menos sus inclinaciones más personales de ahí que no nos duelan prendas en asegurar el ejemplo dado por la popular y católica Arantza Quiroga, presidenta del Parlamento Vasco al utilizar ‘felicitaciones cristianas’ para hablar de algo tan cristiano como es la Navidad, el Nacimiento de Jesús.

Arantza ha escogido para felicitar las Navidades de 2010 un bello Nacimiento napolitano del siglo XVIII. Dicho nacimiento se encuentra en la Catedral de María Inmaculada. Vitoria – Gasteiz. Lo dicho, Arantza ha demostrado, con hechos y no sólo con razones, sus profundas y fitrmes convicciones cristianas de ahí que desde estas lineas queremos felicitarla por «no esconderse y por alardear con firmeza y valentía sus creencias religiosas. Que el político, como cualquier otro ser humano o profesional, no ha de esconderse de mostrarse en todos los ámbitos tal y como se es».

«Para la Hermandad -señalaron fuentes de este colectivo- supone un hecho importante esta felicitación navideña por lo que queremos airearla, hacerla publica y que sirva de ejemplo a otros muchos políticos que, tal vez, están más atentos al ‘que dirán’ que a expresar con libertad y firmeza sus convicciones religiosas».

El el texto Arantza dice en vasco: ‘Neure Zorion eta Bake desira hoberenekin Urte Berrirako’ cuya traducción al castellano, que firma también la Presidenta, señala: ‘Con mis mejores deseos de Paz y Felicidad para el Año Nuevo’. Cierto que en el texto no se especifica realmente lo que acontece en Navidad pero como ocurre siempre -y es el caso que nos ocupa y que hemos querido airear- una foto vale más que mil palabras.

La Hermandad al dar publicidad a esta felicitación navideña quiere también desear a la Presidenta del Parlamento Vasco, la católica Arantza Quiroga mucha Paz y mucha Felicidad para el 2011. Deseos que en el País Vasco tienen una fuerza especial y adquieren un mayor relieve.

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