Católicos y ortodoxos celebraron juntos la Pascua

Católicos y ortodoxos celebraron juntos la Pascua [Sucedió en 2010]

Jerusalén (Tierra Santa), 5 Abr. 10 (AICA)

«En este año nuestra alegría es doble. Todos nosotros, pastores y fieles de las diferentes iglesias, celebramos la única Pascua en el mismo día y en el mismo lugar. Es la misma voz», afirmó el patriarca latino de Jerusalén, Su Beatitud Fouad Twal, en la homilía del domingo de Resurrección en la basílica del Santo Sepulcro.

Los cristianos orientales siguen en buena parte el calendario juliano, propio del Imperio Romano. Aprovechando nuevos conocimientos astronómicos, la Iglesia de Roma hizo una reforma, actualmente vigente en la Iglesia católica latina, conocida como el calendario gregoriano, en 1582.

La existencia de dos calendarios, juliano y latino, explica la celebración de la Pascua en fechas diferentes, aunque en ocasiones esta celebración coincide, como sucedió en este año, y como sucederá el próximo (24 de abril).

La Pascua judía también se celebra en estos mismos días y concluirá este lunes por la tarde.

Las celebraciones en la basílica del Santo Sepulcro fueron organizadas minuciosamente para evitar fricciones entre las diferentes comunidades cristianas que rinden culto en la basílica (ortodoxa griega, católica romana, apostólica armenia, copta, ortodoxa siríaca y ortodoxa etíope).

En medio del gran número de peregrinos, el patriarca reconoció que «quizá a alguno puede molestarle el acumulamiento de oraciones y cantos que se escuchan al mismo tiempo en diferentes ritos. Esta aparente cacofonía, sin embargo, vivida en la fe, se convierte en un sinfonía que expresa la unidad de la fe y de la celebración gozosa de la victoria del Señor sobre el mal y sobre la muerte, de aquel que resucita al tercer día precisamente en este sepulcro. Sí, somos la Iglesia del Calvario, la Iglesia de la tumba vacía, y de la Resurrección gloriosa», aseguró.

Una enorme muchedumbre de peregrinos cristianos de Oriente afluyó en la noche del sábado para participar en la ancestral ceremonia del «fuego sagrado» de Pascua, junto al Santo Sepulcro, encendido por el patriarca ortodoxo griego Teófilos III.+